El picor es uno de los síntomas más evidentes de la presencia de piojos en nuestros hijos. De hecho, ve a los peques rascarse la cabeza es una señal casi inequívoca de la presencia de piojos.
Es evidente que el picor en cabeza puede ser causado por muchas razones, como el sudor, la caspa o simplemente una dermatitis en el cuero cabelludo, pero en caso de notar que nuestros hijos se rascan la cabeza frecuentemente debemos ponernos en el caso de que pueden ser piojos y visitar nuestro centro de eliminación de piojos y liendres de confianza: Pin Pan Pun ¡Fuera!
Además, desde Pin Pan Pun ¡Fuera! el diagnóstico es gratuito, y pueden salir de dudas rápidamente.
De todas formas tenemos que tener en cuenta que no todos los niños se rascan la cabeza en caso de tener piojos. Ojo con este detalle. Para rascarse la cabeza es necesario que la saliva de los piojos, saliva que se inyecta en la cabeza de los peques, provoque una reacción; cosa que no siempre ocurre.
Con respecto a las liendres, hay que tener en cuenta que cuesta menos detectarlas que los piojos. Las liendres se pueden ver normalmente a simple vista, simplemente colocando la cabeza a la luz. Cuando las liendres son nuevas, es decir, cuando aún no han eclosionado y tienen el piojo dentro, tienen un color más oscuro y se sitúan normalmente cerca de la raíz del pelo.
Por otro lado, las liendres más claras son las que ya han eclosionado y aparecen normalmente más separada de la raíz del pelo. En caso se ver estas liendres más claras, tenemos que tener en cuenta que la infestación ya se habrá producido, aproximadamente una semana atrás. En este caso el número de piojos será mucho mayor.
Las liendres se pegan con fuerza al pelo y cuesta mucho separarlas. De hecho, muchas veces se pueden confundir con episodios de caspa en los niños. Una forma de distinguir las liendres de la caspa es sencilla; si al tocarlo con un cepillo o lendrera esta se despega con facilidad, lo más normal es que no tengamos que preocuparnos porque será caspa.
